Novedades

24 de marzo (2011): La Esquina De Chucho despertó del coma... ¿Pero durará? Tun-tun-tuuuuun.

2 de agosto (2012): Como que el Chucho quiere revivir...

sábado, 24 de mayo de 2008

Lagunas Mentales

Hola hola queridísimos lectores! ¿Cómo están? ¿Bien? En vista de que Ads es una webona de lo peor que “no tiene tiempo de escribir algo” (traducción: tiene cosas más importantes que hacer en la vida que dedicarle unos cuantos minutos a Chucho y publicar algo) me decidí esperar la inspiración para publicar algo yo.

Ahora sí a entrar de lleno con el tema. La malacopés jaja creo que ni siquiera es una palabra en sí (y hasta con acento eh… que tal?) , ¿quién de nosotros no se ha puesto malacopa aunque sea por un día de nuestra vida?

Comenzaré explicando que es ser malacopa (por que créanme que hay personas que no lo saben, como nuestro buen chucho Martín que le comenté de mi entrada y dijo ¡Ah que bien! y ¿Qué es eso?) una persona malacopa es un individuo que aparentemente se le pasaron las copitas, tomó de más o como decimos vulgarmente anda hasta la madre, éste actúa de diferentes formas según el caso, la circunstancia o la personalidad de cada quien.


Una cosa que tenemos en común todos los malacopas (me incluyo por obvias razones) es que somos necios, tercos e insoportables. Creemos que lo sabemos todo y siempre tenemos la razón (aunque también conozco a otros que aunque no anden pedos son así jaja).

Existen varias etapas de gravedad en la malacopés. Están los malacopas leves que a veces pueden aplicar el pleito con los amigos o el novio(a) por tonterías, tales como ¡NO, yo todavía no me quiero ir! (del antro o la fiesta) o yo puse un chingo de lana para la peda o algo por el estilo.
En la segunda etapa ya se empieza a poner más cabrón el pedo. En esta etapa se pueden cometer estupideces como: besanguearte a la mitad del antro en una noche o subirte a bailar una coreografía con el grupo de baile de tecate. Esto aunque no es muy placentero tampoco está tan mal, digo como quiera lo soportas sin pasar tanta vergüenza.


En la tercera etapa de malacopés ya estamos hablando de un pedo mortal. En esta preciosa etapa de la malacopés (a estas alturas ya se le puede llamar alcoholismo) pasan cosas como cantarle Oaxaca al dios de porcelana o de plano perder la conciencia y quedar en calidad de bulto (bueno me contaron). En esta etapa verdaderamente ya no hay nada que hacer más que tratar de cubrirte la cara para que todo el antro no vea quien se acaba de caer encima de la mesa tirando todas las botellas.

Después de la tormenta llega la calma. La gloria es cuando llegas a tu preciosa cama (voladora) que tanto extrañaste. Me parece un poco graciosito que generalmente en tu malacopés, siempre al final te estás muriendo de sueño y sólo sueñas (valga la redundancia) en llegar a esa preciosa cama la cual parece que no has visto en años, caes en calidad de bulto a dormir y roncar.

Las mañanas después de una noche malacopa no son mejores, pues tienes que lidiar con mis 2 favoritos tipos de cruda:


#1 Cruda de alcohol.

Todos sabemos cómo es. La hemos experimentado por lo menos una vez o si no la hemos visto en alguien mas, lo cual está mejor que sentirla nosotros mismos.

Puntos mas importantes: sed de la chingada, antojos de embarazada (camarones, chilaquiles, tacos, etc.), sensación de vacío en el estómago (a pesar de no dejar de tragar en todo el día), cuerpo cortado, entre otros (pueden variar de persona a persona).

#2 Cruda moral.

Me atrevo a decir que también todos la hemos vivido. Ésta es todavía peor que la cruda de alcohol pues puede durar indefinidamente (la cruda de alcohol sólo dura un día).

Puntos más importantes: vergüenza del baile de la noche anterior, pleito con los amigos, lagunas mentales, etc.

Estas 2 hermosas crudas combinadas te pueden dejar en la cama por lo menos todo el día siguiente. Ahora que si preguntan mi opinión personal, la moral es peor. Pues al parecer tú pensabas que nadie te vio cuando vomitaste en el baño o te caíste por tratar de bailar muy sensual, pero ¡Oh decepción! cuando te das cuenta que todo mundo te vio y los pocos que no te vieron ya lo saben (alguien más les pasó el chisme) sobre todo en Durango.


En conclusión cuando tuviste una noche de malacopa no hay más que aceptar que la cagaste, pedir perdón en caso de ser necesario, quedarte con tus 2 crudas y esperar a que a la banda se le pase el chisme. Si no te gusto estar de malacopa, no lo vuelvas a hacer, nada te cuesta traer buena vibra cuando andas tomando. Por eso como chucho lo haría todo con exceso y nada con medida.

byee chuchoS!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Ho0o00o0o0las bola de chuchos!!
jajajajajajaja
Pues me di a la tarea de leer todas las publicaciones que han hecho. La verdad están muy geniales y las que más me gustaron fueron una de Vicko que habla de reencontrarte con un ex y la de Martín que trata de la "inspirancia" que llega al estar en el baño.
Espero que tengan nuevas entradas pronto porque me divierto leyendo lo que escriben respecto a sucesos de la vida diaria.
Los Quiero Mucho, bola de chuchos.
Son puro amor.

Bye bye

***Flowersita***